lunes, 12 de enero de 2009

El mayor placer de la literatura es la lectura.

Por diferentes que pueda ser su competencia literaria, el regocijo que produce el acto de abrir las pastas de un libro y comenzar el viaje por sus escaleras de letras es suscrito por autores —y grandes lectores— como Pablo Neruda, Gabriel García Márquez, Roberto Bolaño, Octavio Paz, Jorge Luis Borges o Ricardo Piglia, Eugenio Espejo, Juan Montalvo, Jorge Icaza, José Peralta, etc.,

Estos días de panorama sombrío en lo económico, empero en las librerías y bibliotecas se podrán encontrar puertas y ventanas que dan a horizontes gozosos con la magia del arte de las letras.
Para los amados lectores que con sus lupas buscan en sus lecturas, los libros de todas las generaciones, desde los clásicos, románticos, autores de siempre y para siempre, fresco como añejos, latinos, anglosajones, indios, terrenales y no terrenales; saldrán a mostrar sus células literarias y a demostrar que la literatura es un bálsamo… terapia para el alma, cuerpo y espíritu.

No hay comentarios: